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En España, el aumento de la actividad de bandas juveniles ha sido un tema de preocupación, particularmente en ciudades como Madrid y Barcelona, donde se observa una concentración significativa de estos grupos. Según datos del Ministerio del Interior, en el país operan actualmente alrededor de 627 bandas juveniles, caracterizadas por estructuras jerárquicas y un enfoque en la cohesión y la lealtad.
Los jóvenes que participan en estos grupos suelen enfrentar condiciones de pobreza, falta de oportunidades y desarraigo social, factores que los hacen vulnerables a integrarse en estas pandillas, muchas de las cuales están vinculadas a contextos violentos y delincuencia organizada.
Ante esta situación, los servicios sociales y sanitarios han comenzado a implementar estrategias de intervención integral que incluyen la prevención, el apoyo psicosocial y programas de reinserción. Organizaciones como el Centro de Ayuda Cristiano han puesto en marcha programas que ofrecen a estos jóvenes una alternativa, brindándoles apoyo emocional y actividades estructuradas para reducir su participación en actividades delictivas. Estas intervenciones se centran en ofrecer un entorno seguro donde puedan desarrollar habilidades sociales y reconstruir vínculos positivos, elementos clave para combatir la atracción de estos grupos.
Sin embargo, la prevención sigue siendo un desafío, ya que muchos de estos jóvenes ven en las bandas un espacio de pertenencia que les ofrece un sentido de identidad y apoyo. Para abordar esto, se está promoviendo una mayor colaboración entre servicios sociales, educativos y de seguridad, con el objetivo de detectar tempranamente a jóvenes en riesgo y brindarles alternativas que favorezcan su desarrollo fuera del entorno de las bandas juveniles.
Más info: https://www.newtral.es/bandas-juveniles-violentas-espana/20220217/
https://www.rtve.es/noticias/20220211/bandas-juveniles-violencia-pobreza-desarraigo/2286901.shtml