El primer contacto con el alcohol generalmente comienza en la adolescencia con patrones de consumo similares a los de atracones, con una ingesta excesiva los fines de semana. La exposición al alcohol durante la adolescencia puede alterar los cambios normativos en la estructura y función del cerebro.
Comprender los mecanismos por los cuales el etanol afecta los procesos de desarrollo neurológico es importante para prevenir y mejorar las consecuencias nocivas del abuso de alcohol en los adolescentes.
En este artículo se estudian los mecanismos por los cuales el etanol altera el funcionamiento neuroinmune y sus consecuencias a corto y largo plazo.
Más info: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC9204461/